Consejos

La espalda

Una vez a la altura del cuello, las manos descienden por los hombros con un movimiento envolvente y cogen al niño para sentarlo, colocando la cabeza contra vuestro hombro.
De esta manera, vamos a poder masajear la espalda aplicando las manos en la parte baja
de la misma y subiendo hacia la nuca hasta las orejas si es necesario.

 

El rostroe

Después de calentar la crema con la yema de los dedos, aplicar los dedos en la parte alta
de la frente, bajar hacia las sienes y volver hacia la nariz pasando por debajo de los ojos.
A continuación, bajar por las aletas de la nariz, sobre las mejillas hasta el mentón.

 

Para un efecto relajante, se puede masajear los pies por la noche comenzando
por la parte superior y subiendo hacia cada dedo.

 

Muy rápidamente, su hijo/a podrá reproducir estos gestos.

Los gestos adecuados